Miguel Milà (Barcelona, 1931 - 2024) fue un diseñador industrial e interiorista catalán de una gran importancia e influencia en la historia del diseño internacional, nacido en el seno de una familia numerosa de la aristocracia progresista barcelonesa, relacionada con el ámbito artístico. Su tío Pere Milà Camps encargó a Gaudí la célebre Casa Milà.
Desde 1950 colaboró en el despacho de arquitectura de Federico Correa y de su hermano Alfonso Milà, hasta que en 1958 creó su propia empresa, TRAMO, dónde daría salida a sus diseños ya icónicos del panorama nacional. En los años setenta, diseña junto a sus hermanos (Leopoldo y Alfonso) mobiliario para interiores e iluminación para la empresa Polinax.
Miguel Milà ha sido testigo y protagonista del nacimiento del diseño industrial español a principios de los años 60. Su trabajo, que no pierde su actualidad gracias al racionalismo y la funcionalidad que le imprime su autor, ha sido objeto de numerosas exposiciones antológicas. Además, ha obtenido diversos reconocimientos, entre los que destacan el Premio Nacional de Diseño en su primera edición de 1987, el premio Delta de Oro de ADI-FAD en seis ocasiones, el Delta de Oro especial en 1986, el Delta de Plata en diez ocasiones y el Compasso d’Oro Internazionale en 2008.
En 1991, Miguel Milà creó junto a Escofet el banco modular Tram, que destaca por su diseño ergonómico y confortable que aligera la presencia del hormigón y transmite al usuario la sensación de ser un banco dotado de flexibilidad. Posteriormente, en el año 2009, firma en colaboración con su hijo Gonzalo el conjunto de papelera y cenicero Laurel&Hardy y en el año 2014 el banco urbano Bruno de UHPC Slimconcrete.